Definición: El Bouquet es el conjunto de aromas que un vino desarrolla con el tiempo, ya sea en barrica o en botella. En la cata, el bouquet refleja la evolución de los aromas primarios (frutas frescas), secundarios (producidos por la fermentación) y terciarios (resultado del envejecimiento), formando una estructura compleja y armoniosa. Puede incluir notas florales, especiadas, tostadas, minerales o incluso recuerdos de cuero y tabaco, dependiendo del tipo de vino y su proceso de maduración. Identificar y apreciar su bouquet es clave para comprender la profundidad y calidad de un vino.
Ejemplo: Imagina que estás catando un vino tinto reserva. Al acercar la copa a tu nariz, primero percibes aromas de frutas maduras como cereza y ciruela (primarios). Luego, aparecen notas de vainilla y cacao, resultado de la fermentación y la crianza en barrica (secundarios). Con más tiempo de evolución, el vino revela matices de cuero y tabaco (terciarios), creando un bouquet complejo y elegante que refleja su envejecimiento.
Ejemplo 2: Al acercar la copa de un vino blanco aromático a la nariz, emergen delicadas notas de jazmín, azahar y rosa, formando un bouquet fresco y elegante. Cada aroma se entrelaza, evocando la sensación de un ramo de flores recién cortadas, añadiendo sutileza y encanto a la experiencia sensorial.
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